Los Iconos Sagrados: la guía completa

Iconos sagrados. La mera mención de ellos evoca sugerencias exóticas y fascinantes, una forma de vivir la religión sólo aparentemente lejas de la moderna. Descubramos los secretos de este antiguo y emocionante arte.

Holyart ya ha tratado con iconos sagrados en el pasado. ¿Y cómo podría ser de otra manera? Pocas manifestaciones artísticas pueden equipararse a estas representaciones, verdadera expresión de la religiosidad medieval, impregnada de un profundo simbolismo que trasciende la materia. En un artículo anterior, dedicado en particular a los iconos rusos, nos centramos en cómo en un icono sagrado cada detalle expresa un concepto, un significado superior. Hemos definido al creador de iconos más un escritor que un pintor, por su habilidad de entretejer referencias continuas a episodios evangélicos, insertando mensajes espirituales ocultos en cada detalle de su obra. Un icono sagrado termina siendo el resultado de una misión teológica, antes que una artística.

Los artesanos y pintores maestros en el arte de los iconos todavía usan las antiguas y severas reglas de la iconografía bizantina, con técnicas reportadas en manuales especiales, las hermeneia, que deben seguirse al pie de la letra. Cada icono es único, irrepetible y de esta unicidad deriva su valor.

Pero, ¿qué es un icono?

Es una representación sagrada pintada en madera, típica de la producción artística bizantina y eslava. La palabra ‘icono’ deriva del ruso “икона”, que a su vez deriva del griego antiguo εἰκών –όνος, del verbo eikénai, ‘ser similar’, ‘aparecer’. Otra derivación es de la palabra griega bizantina eikóna, que se puede traducir con ‘imagen’.

En particular, los antiguos iconos rusos generalmente se reproducían en tablas de tilo, alerce o abeto. El procesamiento requerido para crear una base ideal para los antiguos iconos sagrados era largo y laborioso. De hecho, era necesario que la madera se cubriera con varias capas de cola de conejo y yeso que luego se lijaban, con piel de pescado seca o papel de lija. Se obtenía, de esta manera, la llamada levaks, una superficie lisa sin porosidad, ideal para difundir colores y doraduras. Hablando de colores, esos eran naturales, obtenidos con plantas y minerales y mezclados con yema de huevo. El marco era un elemento muy importante, porque también era parte de la pintura, enfatizando la separación entre la tierra y el cielo, entre plan terrenal y divino. Incluso las doraduras permitían obtener sorprendentes efectos tridimensionales.

Al igual que los rusos, los iconos sagrados rumanos también se derivan del antiguo arte bizantino. Se caracterizan por colores cálidos e intensos, y sus personajes están representados con rasgos faciales móviles y humanos. Esto los acerca un poco más a la sensibilidad y percepción estética occidental. Están pintados a mano sobre tablas de madera o incluso sobre vidrio, utilizando colores de témpera, adornados con decoraciones refinadas en pan de oro.

¿Cómo se calcula el valor de un icono?

No es fácil. Pero es necesario entender, al menos en parte, cómo hacerlo, si queremos acercarnos a este maravilloso mundo. Muchos sitios ofrecen iconos sagrados a la venta sin garantizar su autenticidad y sin explicaciones que justifiquen su valor.

Al evaluar un icono sagrado, es necesario tener en cuenta diferentes parámetros, como la técnica con la que se creó, que va desde la producción totalmente artesanal hasta la serigrafía, la «escuela» de origen, el trazo del artista, las dimensiones.

En cuanto a la técnica, podemos resumir los tipos de iconos actualmente en el mercado de la siguiente manera:

• iconos serigrafiados
• iconos sagrados hechos a mano
• iconos pintados a mano según el método tradicional, con un fondo dorado pintado (es decir, sin usar pan de oro o plata)
• iconos pintados a mano según el método tradicional, con un fondo dorado creado con una delgada hoja de metal no precioso (similar al oro o la plata)
• iconos pintados a mano utilizando el método tradicional y utilizando una hoja de metal precioso (oro o plata)

Con respecto a las escuelas,  los iconos sagrados que se venden hoy provienen principalmente de Rusia, Grecia (estas dos escuelas son las más famosas y apreciadas), pero también de Rumania.

El trazo distintivo del artista es un elemento fundamental que caracteriza al icono, independientemente de su origen y los materiales utilizados. En particular, se manifiesta en la forma en que se pintaron los rostros, en el uso de los colores y la luz.

Las dimensiones del icono pueden ser las más dispares, pero generalmente consideramos tres formatos de referencia comunes:

• 18 x 22 cm
• 22 x 32 cm
• 32 x 44 cm

En particular, en el catálogo de Holyart encontrarás varios tipos de iconos, hechos con diferentes técnicas y materiales, procedentes de las tres escuelas mencionadas.

Los iconos sagrados hechos a mano

Entre los iconos hechos a mano que puedes encontrar en el catálogo de Holyart, señalamos en particular los Iconos rusos pintados a mano en tablas antiguas. Estos son iconos creados por maestros artesanos pertenecientes a las diversas escuelas iconográficas de Rusia pintados sobre bases que datan del siglo pasado. Los iconos están hechos con la técnica de la pintura al temple de huevo sobre bases de madera, levkas y fondo oro. Cada icono cuenta con un certificado de garantía y originalidad, con una evaluación preparada por los expertos del Ministerio de Cultura de Rusia, y documentos de exportación.

Incluso los Iconos rusos pintados mantienen técnicas tradicionales y están totalmente hechos a mano con pintura al temple, sobre tablas de madera de tilo y decorados con pan de oro.

Los Iconos pintados a mano de origen rumano Holyart son piezas únicas, totalmente hechas a mano sobre tablas de madera con la técnica de pan de oro y temple. Los artesanos y pintores rumanos utilizan las antiguas y estrictas reglas de la iconografía bizantina para crear obras maestras únicas e irrepetibles.

Por supuesto, en la tienda Holyart también encontrarás espléndidos iconos sagrados serigrafiados, iconos en cruz e iconos con placa de plata y oro con oklad.

Las imágenes de los iconos sagrados

¿Qué representan los iconos sagrados? Los iconos rusos, en particular, se refieren directamente a los retratos de María atribuidos al Apóstol Lucas, al Sudario y a otras representaciones muy antiguas de Jesús y la Virgen.

Los temas de los íconos rumanos a menudo están vinculados a María, una madre tierna y amorosa, como en los íconos que la representan como la Madre de Dios de Tolga, del monasterio de Tolga que se encuentra donde se encontró el antiguo ícono original, y a Jesús representado como Buen Pastor y protector. Pero también hay representaciones de la Sagrada Familia y santos y mártires. También famosa es la Madre de Dios de Korsun, que toma su nombre de la ciudad rusa de Korsun, en la que, según la leyenda, el primer icono fue pintado por el santo evangelista Lucas.

Los iconos griegos se pueden dividir de la siguiente manera:

• Iconos de la Santísima Madre de Dios
• Iconos del Santísimo Salvador
• Iconos melquitas, en el área del Medio Oriente, con Cristo, los ángeles y santos con tez y rasgos árabes.
• Iconos de fiestas móviles
• Iconos de fiestas fijas

Las técnicas de procesamiento de los iconos sagrados

Ya hemos mencionado las diversas técnicas de procesamiento necesarias para realizar un icono sagrado digno de esta definición y cómo los tiempos son muy largos y los pasos necesarios son muchos.

En primer lugar, es necesario encontrar la tabla correcta.

La madera debe ser tierna, como el tilo o el abeto, utilizados en Rusia o la Haya. La tabla debe liberarse de todos los nudos y lijarse muy bien. Sobre la tabla lijada se aplica una tela de lino o algodón sobre la que se extienden varias manos de yeso disuelto con pegamentos de animales. Antes de realizar cada paso, hay que esperar hasta que la capa anterior se haya secado por completo.
Luego, se lija la mesa con papel abrasivo para obtener una superficie perfectamente lisa y blanca. Esta es la levaks de la que hablábamos antes.

Por lo general, el artesano copia fielmente el icono de uno existente. Cada trazo de lápiz se calca con un punzón, para mantener el diseño incluso después de extender los colores y la doradura. La hoja de oro se coloca en las partes destinadas a ser doradas y luego se lima con piedra de ágata.
Después del doradura, se aplica el temple, hecho con pigmentos naturales, disuelto con yema de huevo. Los colores recurrentes son rojo, azul, verde, ocre, blanco y negro. Primero se difunden los colores oscuros, luego los claros, en un aclararse progresivo del dibujo, que también recuerda un paso simbólico de la oscuridad a la luz.

Al final, se pasa en el icono sagrado la olifa, una mezcla de aceite de linaza cocido y conservantes que preserva la pintura y mejora la transparencia y la profundidad de los colores.

Los huevos rusos

Los huevos rusos merecen un capítulo aparte. Estos son huevos de madera con iconos pintados a mano y serigrafiados, hechos en Rusia. Para realizarlos, se utiliza a menudo, la técnica del decoupage.

Los huevos rusos pintados a mano son creados por los mejores pintores de iconos de la tradición de las miniaturas, una técnica de pintura antigua nacida en Rusia que se caracteriza por los detalles expresivos de rostros y los escenarios muy detallados, realizados con una lupa y usando solamente una cuerda de pincel. Estas son verdaderas y pequeñas obras maestras, porque la forma misma del huevo hace que el procesamiento sea particularmente difícil y solamente unos pocos pintores y artistas competentes logran la pintura y serigrafía de los iconos en una superficie de este tipo.