La atmósfera navideña proviene de una alquimia única y especial, hecha de expectativa, esperanza secreta, una dulce nostalgia por el pasado, a la que se une el deseo de un futuro brillante para aquellos a quienes amamos. Perfumes, luz, calidez, sugerencias, para la Fiesta de todas las fiestas. ¿Cómo crear una atmósfera navideña en casa?
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Es innegable: lo que más nos gusta de la Navidad, más allá del profundo significado religioso que tiene esta fiesta para todos los cristianos, es la atmósfera que se respira en el aire ya varias semanas antes del 25 de diciembre. La atmósfera de Navidad involucra a todos, creyentes o no, es imposible ignorarlo, envolvente, como una manta cálida y suave, como una música de campanas de plata en la noche, para cubrir el silencio. Se puede respirar en todas partes, a lo largo de las calles relucientes de iluminaciones y festones, en las tiendas decoradas con cintas rojas y doradas, con las escaparates llenas de productos hermosos, coloridos y acogedores, en los restaurantes, donde la música de Navidad a menudo resuena y hasta los platos parecen tener un sabor. diferente.
Si pensamos en Navidad, esto es probablemente lo primero que viene a la mente, hecho de aromas embriagantes de canela y clavos, de rojo, oro, plata brillante de guirnaldas y velas encendidas, del buen calor que se expande por todas partes, alejando el frío y la oscuridad.
Esta atmósfera especial se concentra principalmente en los hogares. ¡Difícil mantenerla afuera, cuando todo es tan hermoso! Cada uno puede decidir si dejarla entrar y cuánto, y quizás incluso enfatizarla más, poblando la casa con objetos y símbolos de la fiesta. Porque incluso las casas, en Navidad, son diferentes del resto del año. Es como si el amor tomara forma y color, como si se hiciera tangible, en la suavidad de las telas cálidas dispuestas en todas partes para calentar, pero también para decorar, en el aroma de galletas y velas con sabor a naranja, manzana, especias, en el resplandor de las decoraciones del Árbol de Navidad. Porque, al final, lo que importa es y sigue siendo solamente esto: el amor que se respira en una casa, que une a los que viven allí, y que siempre debería permanecer vivo y vibrante, no solamente durante las vacaciones, pero digamos que en Navidad como dicen, es realmente más fácil sentirlo.
¿Pero qué crea la atmósfera navideña en casa?
Las soluciones son infinitas y dependen sólo del gusto personal y del tiempo que desees dedicar a decorar la casa para la Navidad, para que sea realmente especial. Si hay niños en el hogar, probablemente optarás por diferentes soluciones, ya que a menudo ellos son los simpatizantes más entusiastas de la Fiesta, con todos los pros y contras.
Holyart quiere hacer una pequeña lista, 10 elementos que no pueden faltar en la casa durante las vacaciones.
Holyart siempre ha apoyado la tradición, pero con un ojo siempre centrado en la innovación. No es una coincidencia, entonces, si en la parte superior de esta lista vemos los proyectores de navidad, un producto decididamente moderno, una nueva forma de decorar la casa y el jardín, que solo se ha consolidado en los últimos años.
¿Qué es? Los proyectores de luces de Navidad son aparatos que consisten en una fuente de luz (LED o láser), insertada dentro de una lámpara de cuerpo generalmente de plástico o aluminio. Esta lámpara halógena LED distribuye un haz de luz en una pared o árboles a cierta distancia, proyectando imágenes (estrellas, copos de nieve, ángeles, etc.). En la práctica, es la versión moderna de las viejas linternas mágicas que, con una vela insertada en el interior o, en tiempos más modernos, una bombilla, proyectaba imágenes fantásticas y en movimiento en las paredes.
Los proyectores de Navidad te permiten crear una atmósfera encantada sin la necesidad de usar decoraciones, festones, pegatinas para ventanas. Simplemente, instala tu propio proyector con total autonomía, para cubrir paredes enteras de cascadas de luces de colores, puntos palpitantes, estrellas, sin esfuerzo y con un gasto de energía insignificante, ya que tanto los proyectores láser como los LED tienen un bajo consumo de energía.
Un gran clásico, inevitable en la casa durante las fiestas. Ya sea pequeño, grande, tradicional, o decorado con adornos recuperados del baúl de los abuelos en el desván y transmitidos por generaciones, o ultramoderno, con colores y líneas de diseño, el Árbol de Navidad es el eje alrededor del cual se reúne la familia, el núcleo central a partir del cual se expande la atmósfera navideña. Pero, ¿cómo elegir el Árbol de navidad? En primer lugar, ¿Árbol de navidad artificial o verdadero? Existen ventajas y desventajas en ambas soluciones, como ya hemos explorado en un artículo anterior, desde la mayor sostenibilidad de los árboles artificiales hasta la facilidad de manejo y limpieza, y la posibilidad de elegir entre una gran variedad de productos, modelos y colores, obviamente inconcebible en la naturaleza. Por otro lado, el aroma de la madera y la naturaleza que emana el verdadero Árbol de Navidad es algo que nunca se puede reproducir artificialmente.
Si luego se opta por un árbol artificial, hay varias cosas que es bueno saber, sobre las medidas, el número de puntos, el material del cual está hecho el árbol (el PVC clásico o el POLIETILENO), el tipo de ensamblaje, o sea apertura de ramas, etc.
Una vez que hayas elegido el árbol correcto, también será importante decidir cómo decorarlo, y esto dependerá exclusivamente del gusto personal, la tradición familiar y el tipo de decoración del hogar. El consejo de Holyart es solamente uno: que el momento de decorar el Árbol de Navidad no es una ocasión de estrés, otra más durante las vacaciones, sino algo agradable y placentero, para hacer junto con sus seres queridos, tal vez incluso con la participación de los niños. Siempre recordamos que, más allá del símbolo constituido por el árbol, es el amor que gira alrededor de él, el elemento que realmente crea la atmósfera navideña.
La luz es uno de los elementos más importantes para crear la atmósfera navideña. Ya sean las luminarias a lo largo de las calles, las guirnaldas de luces alrededor del Árbol de Navidad, la de los proyectores de Navidad, ya mencionados.
Y luego están las Velas navideñas, naturalmente. Nada más que esto crea esa atmósfera enrarecida y mágico, que le da a la casa un aire de fiesta. Rojas, doradas, plateadas, se convierten en elegantes y refinados accesorios de decoración. Se puede elegir entre infinitas formas, desde las clásicas hasta las más originales, para cada hogar y cada necesidad. No faltan las típicas de Navidad, en forma de ángel, estrella, Árbol de Navidad, Papá Noel, quizás decoradas con acebo, o usadas para un bonito centro de mesa decorado con bayas rojas, o aún insertadas en delicados portavelas de vidrio, decorados con oro, plata, o con imágenes de Navidad.
No hay que subestimar el aroma de las velas navideñas. Ya el simple olor a cera es en sí mismo agradable y reconfortante. A menudo, entonces, las velas navideñas están perfumadas con delicadas fragancias que alimentan aún más la sensación de calidez y fiesta. Frutas cítricas, manzanas, clavos, canela y otras especias. Reemplazan un poco las cáscaras de las mandarinas colocadas en la estufa, o la de galletas y pasteles hechos en casa. Perfumes que difunden una sensación comparable a un cálido abrazo.
En resumen, más velas se encenderán en el hogar durante las vacaciones, más luz y calor infundirán en el ambiente, creando una atmósfera incomparable.
Ya sea que los utilicemos para decorar el Árbol de Navidad, el balcón y el jardín, las luces de Navidad son un elemento clave para embellecer la casa durante las fiestas y crear la atmósfera navideña. Desde la antigüedad, la luz ha sido considerada con un valor positivo y reconfortante, en contraste con la oscuridad. El cristianismo también ha reunido este valor, asociando la luz con la figura de Cristo, y haciendo que el triunfo de la luz sobre la oscuridad coincida con la esperanza de salvación traída por Él al mundo contra el mal y el pecado. De ahí la tradición de iluminar casas y calles durante las vacaciones de Navidad, uno de los momentos en que el amor y la fuerza de Jesús se sienten aún más poderosamente entre los que lo aman y miran a Él como la única salvación posible. Inicialmente, las velas y las lámparas se usaban para iluminar la noche de Navidad, pero con el tiempo hemos pasado a sistemas de iluminación más modernos y más seguros.
Obviamente, las luces del Árbol de Navidad deben elegirse para armonizar con las decoraciones y estar dispuestas para resaltarlas, enfatizando el brillo y los colores. El efecto final debe ser homogéneo y de gran impacto. Por esta razón, será necesario establecer de antemano cuántas luces serán necesarias para nuestro Árbol, de qué tipo (LED o incandescente), en luz cálida o fría, monocromáticas o de colores.
Para el jardín y el balcón hay cadenas de luces y decoraciones luminosas disponibles para uso en exteriores. Se prestan a numerosas soluciones decorativas, según el tamaño y el diseño del espacio exterior. Se pueden utilizar para decorar árboles, arbustos, columnas, barandas, bancos, toda la fachada de la casa.
Es esencial para tu seguridad que las palabras ‘para externo’ estén indicadas en el paquete y en la etiqueta, además del Código IP (Grado de protección IP), que indica el grado de protección del material eléctrico en presencia de partículas sólidas (por ejemplo polvo) o líquidos. El estándar de protección requerido para las luces de Navidad al aire libre debe ser al menos IP44. También es siempre mejor elegir LED de bajo consumo.
También hay soluciones hechas en casa, como pequeñas linternas hechas en casa con frascos de conservas y un poco de cuerda, con en el interior las luces, para crear un efecto aún más sorprendente.
5. El pesebre
Incluso en el caso del pesebre, hay muchas soluciones diferentes. El pesebre es un elemento típico de la tradición navideña de nuestro país desde la Edad Media. Incluso entonces existía la costumbre de reproducir la escena de la Natividad de Jesús con reconstrucciones reales de la cabaña de Belén y el paisaje circundante. Era una forma de devoción, que con el tiempo se convirtió en una verdadera forma de arte.
Las estatuas de la escena de la natividad, originalmente construidas en terracota o madera, más tarde en polvo de mármol, se han convertido en elementos de una expresión artística y religiosa única a lo largo de los siglos. Incluso hoy en día que la mayoría de los pesebres modernos están hechas de estatuas de resina o materiales plásticos, hay expertos artesanos que realizan el trabajo tradicional con orgullo.
Pensemos en los pesebres de las grandes tradiciones italianas, desde la napolitana, con estatuas en movimiento, o la de Val Gardena, con las espléndidas escenas de la natividad totalmente talladas en madera (Los Pesebres de Holyart: elige el estilo adecuado para la Navidad perfecta).
Hoy en día muchos optan por crear un pesebre en casa, aprovechando los muchos elementos disponibles en tiendas especializadas, que permiten crear chozas, pueblos y entornos de gran efecto. Los elementos para un pesebre hecho en casa están hechos de diferentes materiales, desde piedra a madera de arce u olivo, a porcelana, resina, para todos los gustos y presupuestos. El pesebre puede entonces ser poblado con los personajes favoritos.
Luego hay hermosos pesebres que se venden ya completos, con todos los accesorios y estatuas. Algunos de ellos, particularmente modernos y sofisticados, pueden ser verdaderos objetos de decoración y diseño. En general, la tradición siempre predomina, con muchas variaciones adecuadas para todos los gustos y rangos de precios. También en este caso, así como para el árbol, lo importante es el espíritu con el que uno está a punto de colocar el pesebre en su propia casa, recordando los valores simbólicos, el gran misterio del amor que se encierra en la escena de la Natividad.
En los pueblos navideños, todo está diseñado para ser elegante, recogido, colorido, reproducido perfectamente en un estilo que huele a pasado y nostalgia. Luces, detalles elegantes, casas de colores pastel, pequeños molinos, ruedas panorámicas, carruseles con caballos… Incluso los pequeños personajes son parte de la magia, esquiadores, patinadores, el pequeño Papá Noel.
Un pasatiempo para adultos, a menudo para coleccionistas, pero que da vida a creaciones espectaculares, ¡realmente impregnadas de atmósfera navideña!
7. Corona de adviento
La Corona de Adviento no es solamente una decoración de Navidad para adornar y decorar la casa con motivo de las Fiestas, sino también un objeto de gran valor sagrado para los creyentes. Todos los elementos que la componen, desde las ramas verdes y las bayas que recuerdan la temporada de invierno, hasta la corona, símbolo de la unidad, la comunión y la eternidad, tienen un fuerte carácter simbólico. Las cuatro velas, entonces, acompañan a los fieles en la espera de la Navidad, marcando las cuatro semanas que transcurren entre el encendido de la primera de ellas y el 25 de diciembre.
De hecho, se enciende una vela para todos los domingos de Adviento, y las cuatro tienen un valor preciso:
- La primera vela es la de “el Profeta”: recuerda las profecías sobre la venida del Mesías.
- La segunda vela es la de “Belén”, en memoria del lugar donde Jesús vio la luz
- La tercera vela es la de “los pastores”, los humildes entre los humildes, los primeros en ver y adorar al Mesías
- La cuarta vela es la de “los Ángeles”, quienes anunciaron a todo el mundo el milagroso nacimiento de Nuestro Señor
Juntas, las cuatro velas simbolizan la salvación ofrecida a todos los hombres gracias al nacimiento de Jesús, la victoria de la Luz contra la Oscuridad. Las Coronas de Adviento, con sus ramas verdes, las bayas rojas, las cintas doradas y plateadas con las que están adornadas, se convierten en hermosos accesorios de decoración para el hogar y en elegantes centros de mesa para las fiestas.
Hay películas para familias típicamente asociadas con la Navidad, que se transmiten inevitablemente cada año durante las vacaciones. Estas son películas que a menudo son adecuadas para los niños, historias edificantes, conmovedoras, que deberían llevar a las personas a reflexionar o abrir sus corazones a los buenos sentimientos. También hay muchos DVDs más específicamente relacionados con la religión cristiana, con la vida de Jesús y los santos. ¿Qué mejor ocasión que la Navidad para profundizar ciertos temas? Nuevamente, la Navidad puede ser una buena oportunidad para escuchar con toda la familia un concierto de Navidad, tal vez grabado en el Vaticano, o en algún otro lugar sagrado. Estos también están disponibles en DVD, para ser apreciados en casa, durante las vacaciones.
Hablando de las atmósferas navideñas en casa, ya hemos mencionado el uso de la Corona de Adviento como centro de mesa. Es solamente un ejemplo de cómo enriquecer la mesa durante las fiestas, para hacerla aún más acogedora y hermosa. Se pueden usar como centros de mesa coronas y guirnaldas hechas con ramas de hoja perenne, como abeto, eléboro o acebo, o incluso con ramitas secas entrelazadas. Como decoraciones, puede haber bayas rojas, copos, bolas de navidad, palitos de azúcar, piñas en natural o pintadas en oro o plata, o rociadas con purpurina o brillo. El centro de mesa también puede ser un cómodo portavelas, si se acompaña de pequeños recipientes de vidrio. Es importante pensar que será alrededor de la mesa que la familia pasará la mayor parte de las vacaciones, y es esencial que hable de nosotros, de nuestro amor.
10. Haz una donación a quienes más lo necesitan
El último punto con el que queremos tratar no es realmente un objeto, o un consejo comercial, sino una invitación a la reflexión. Porque mientras nosotros podemos elegir entre tomar un abeto real o artificial como el Árbol de Navidad, o qué tipo de luces usar para decorarlo o cómo embellecer nuestra mesa, hay muchas personas que tienen que enfrentar problemas mucho más graves e inminentes. Entonces, ya que, como hemos repetido en más de una ocasión, es el amor lo que fluye dentro y alrededor de nosotros para crear la atmósfera navideña, ¿por qué no hacer un gesto de generosidad y dar algo a los menos afortunados? Una oferta, una acción caritativa, algo que probablemente no nos privará de ninguno de los placeres que hacen que la Navidad sea hermosa y especial, pero que marcará la diferencia para aquellos que realmente lo necesitan todo. Al final, nos dará mucho, mucho, y hará que el día de la Fiesta sea realmente especial, inolvidable.