El 17 de marzo celebramos a San Patricio, patrón de Irlanda. Una fiesta llena de alegría, colores (especialmente verde) y música. ¿Pero quién era este santo todavía tan querido por los irlandeses de todo el mundo?
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San Patricio, patrón de Irlanda, pero también de Nigeria, de Montserrat, Nueva York y Boston, así como de los ingenieros, debe su fama al Saint Patrick’s Day, la fiesta nacional más grande de Irlanda, sin embargo, celebrada en todo el mundo, donde sea que haya una comunidad irlandesa. Una alegre fiesta llena de música y colores, celebrada con desfiles, conciertos, fuegos artificiales y muchas cervezas en los pubs. El color dominante es el verde, porque Irlanda también se conoce como la isla verde. Muchos se pintan la cara de verde para la ocasión, o usan ropa o tocados de este color.
Cerveza monástica
La producción de cerveza en los monasterios proviene de necesidades. La cerveza era un verdadero alimento.
Además, uno de los símbolos de San Patricio es el trébol. La leyenda dice que el Santo, en el momento de su apostolado, lo usaba como un ejemplo para explicar el concepto de la Trinidad a los irlandeses. No es casualidad que quienes encuentren un trébol en el día de San Patricio estén destinados a disfrutar el doble de suerte durante el resto del año.
¿Qué se hace el día de San Patricio? Lo ideal sería ir al Castillo de Blarney en Cork y besar la Blarney Stone, una piedra ubicada en la cima de una torre alta que da el don de elocuencia a quienes ponen sus labios sobre ella. Pero si no tienes una manera de ir hasta allí, hay otras formas de rendir homenaje a este santo especial. Simplemente lleva puesto algo verde y tal vez… ¡besa a un irlandés!
¿Pero quién era San Patricio?
La Historia de San Patricio
El verdadero nombre del Santo era Maewyin Succat, nacido en la Gran Bretaña romana entre 385 y 392 d.C. y perteneciente a una familia de nobles terratenientes.
A la edad de dieciséis años fue secuestrado por piratas irlandeses y vendido como esclavo al Rey de Dalriada (o Dál Riata o Dal Riada), un reino que incluía parte de Escocia e Irlanda, cuyos habitantes eran llamados Escotos, «saqueadores», «invasores». En los seis años que pasó con estas personas, el chico aprendió el idioma gaélico y la mitología celta, lo que le habría servido mucho más tarde para acercarse a los pueblos de Irlanda. Cuando finalmente logró regresar con su familia, había madurado la conversión al catolicismo y tomó sus votos convirtiéndose primero en diácono, con el nombre latino de Patricio, luego en 420 d.C. en obispo.
Fue el Papa Celestino I quien le confió la delicada tarea de evangelizar Irlanda y las Islas Británicas. Delicada, porque entonces esas tierras eran paganas y pobladas por muchas tribus diferentes. San Patricio no se desanimó. Los años en la corte de Muirchu, rey de Dál Riata, le habían dado los conocimientos necesarios para poder relacionarse con las personas que vivían en esos lugares salvajes. Inmediatamente comenzó a predicar en gaélico, el idioma local, y viajó por toda Irlanda para promover el llamado Cristianismo celta, que retomaba las antiguas tradiciones locales declinándolas en clave católica. Basta pensar en la cruz celta, que consiste en un círculo vacío colocado en una cruz latina, de modo que el centro del círculo coincida con el punto de intersección de los brazos de la cruz, y que probablemente se refiere a la rueda solar (antigua runa del sol negro), a la cruz solar (que representaba al Sol y era el símbolo del poder) y a otros símbolos precristianos.
Tipos de Cruces y sus significados
La cruz es un símbolo antiguo, que ha conocido muchas y diferentes variaciones a lo largo del tiempo.
Patricio fundó abadías y monasterios y trabajó duro para ayudar a los pobres y necesitados.
Entre las leyendas y los actos milagrosos que se le atribuyen, recordamos la expulsión de las serpientes de la isla verde (se dice que gracias a él en Irlanda no hay serpientes), y el milagro del majuelo (el santo habría colocado en un arbusto de esta planta su capa para que se seque después de usarla como una balsa para cruzar un río, y desde entonces el majuelo florece en invierno).
Incluso hoy, su Bendición del Viajero Irlandés es famosa (Irish journey blessing):
May the road rise to meet you,
may the wind be always at your back,
may the sun shine warm upon your face,
and the rains fall soft upon your fields and,
until we meet again, may God hold you in the palm of His hand.
“Que la tierra se vaya haciendo camino ante tus pasos,
que el viento sople siempre a tus espaldas,
que el sol brille cálido sobre tu cara,
que la lluvia caiga suavemente sobre tus campos y,
hasta tanto volvamos a encontrarnos,
que Dios te lleve en la palma de su mano”.
¿Qué día es el día de San Patricio?
La mayoría de los historiadores indican el 17 de marzo de 461 d.C. como el día de la muerte de San Patricio. Se dice que el Santo murió en Saul, condado de Down, y luego fue transportado al actual Downpatrick. A partir de 1600 en este día se conmemora la llegada del cristianismo a Irlanda a manos del Santo, y es una fiesta nacional en la República de Irlanda. Es una de las fiestas nacionales más celebradas en el mundo.
¿Por qué San Patricio es tan importante en Irlanda?
Los irlandeses han estado celebrando el Saint Patrick’s Day, o St. Paddy’s Day (en irlandés: Lá ‘le Pádraig o Lá Fhéile Pádraig) desde los siglos IX y X. Grandes desfiles, banquetes y bailes frenéticos se llevan a cabo en toda la isla, pero también en todos los países del mundo que albergan una comunidad irlandesa. El principal protagonista de esta fiesta es la cerveza, en particular Guinness, una cerveza oscura típica irlandesa, también utilizada para cocinar el dulce Guinness Cake, y la sidra obtenida de la fermentación de la manzana. Se come el roast dinner, carne de res hervida, servida con papas asadas, guisantes y zanahorias, soda bread (pan de soda) y apple tart (tarta de manzana).
El pozo de San Patricio, ¿dónde está ubicado?
Otra leyenda dice que, en algún momento, San Patricio se había retirado en oración al islote lacustre de Lough Derg, en el condado irlandés de Donegal. Aquí se abría una cueva tan profunda que se decía que las puertas del Purgatorio se abrían allí. Por esta razón, el lugar se apodó Purgatorio de San Patricio o Pozo de San Patricio. La cueva fue amurallada en 1497, y hoy hay una iglesia, destino de peregrinación penitencial.
En Orvieto, Italia, el Papa Clemente VII ordenó la construcción del Pozo de San Patricio entre 1527 y 1537. Es una obra maestra de ingeniería creada por Antonio da Sangallo el Joven como refugio en caso de asedio. De hecho, el pozo está estructurado de tal manera que se pueda suministrar fácilmente con agua. Es una estructura tallada en la toba que se hunde en el suelo por 54 metros, con dos tramos de escaleras helicoidales unidireccionales. Su diámetro es de 13 m. Toma su nombre de la cueva del lugar de retiro del Santo irlandés.
Hoy, con la definición del pozo de San Patricio, también nos referimos a un suministro ilimitado de riqueza, o una empresa interminable que devora tiempo y energía innecesariamente.